¿Eres de las que alguna vez ha dicho en voz alta “no quiero ser madre”? Y si lo has dicho ¿qué te han contestado?
Es posible que en este caso, la respuesta o la reacción de quien te ha escuchado no haya sido demasiado favorable. Y es que, lo de ser madre, es un rol que la sociedad ha querido atribuir absolutamente a todas las mujeres. Sin siquiera haberles preguntado a todas si quieren ejercerlo o no.
Se suele pensar, o mejor dicho, se da por hecho, que todas las mujeres están preparadas para ser madres…y que todas quieren serlo. Además se piensa también que cuando llega ese hijo, el instinto maternal (si no lo tenías antes) aparece en ese momento. Lo cierto es que no siempre es así.
Las presiones sociales sobre la maternidad
Es muy posible que te lo hayan dicho a ti misma muchas veces…
Expresiones tan repetidas como ”y tú para cuándo?” o “se te va a pasar el arroz” entre otras muchas; llevan mucho tiempo ejerciendo una presión importante sobre las mujeres, cosa que no ocurre con los hombres y la paternidad.
Según los últimos estudios sobre el tema, cada vez hay más mujeres que deciden, de manera voluntaria, no ser madres: y no por problemas económicos o laborales, sino simplemente porque no quieren serlo.
Es cierto que en algunos casos, la poca estabilidad económica o el deseo de un mejor desarrollo en el terreno laboral, pueden ser factores que hagan a una mujer decidir que no quiere tener hijos. Pero eso no ocurre en todos los casos.
Como decía, en muchos de ellos la razón es tan simple como que la mujer no se ve en el papel de madre. O lo que es lo mismo, el ser madre no es un deseo que tienen todas las mujeres, ni mucho menos.
Y a pesar de que esta decisión voluntaria es cada vez más frecuente, la sociedad la sigue interpretando como una decisión poco natural y extraña. Mucha gente se sigue sorprendiendo cuando una mujer afirma no querer tener hijos. Bueno…en realidad se ve como extraña y sorprendente en el mejor de los casos, lo habitual es que se tache de “egoísta” a la mujer que libremente decide no tener hijos.
La definición de egoísta, según el diccionario es “persona que antepone el interés propio al ajeno”. Podríamos concluir entonces que, para mucha gente, una mujer que no quiere dedicar su tiempo y su esfuerzo al cuidado de unos hijos ¿es egoísta?
¿Madres por convicción o por obligación?
Algunas mujeres lo han tenido y lo tienen muy claro desde siempre, unas tienen claro que quieren ser madres y otras no. Sin embargo, muchas otras podrían tener dudas de si realmente quieren ser madres o no, y se pueden sentir presionadas para serlo: por la sociedad, por su entorno, por su pareja, y hasta por su religión.
Podría pasar incluso que muchas de ellas ni siquiera se lo planteen: que ni siquiera piensen que tienen la opción de no ser madres. Podrían entender que es lo que les toca, es a lo que se les “obliga” de una manera implícita. De hecho, en una conversación entre mujeres y sobre el tema de los hijos, se puede escuchar a alguna de ellas decir aquello de “yo ya cumplí” y… la pregunta sería ¿con quién?, o ¿con qué
Según los estudios al respecto, las mujeres que no desean tener hijos se sienten realizadas en muchas otras áreas de su vida: en la laboral, en la sentimental, social, etc…y no tienen la necesidad ni tampoco las ganas de tener hijos.
¿Cuáles son las causas de no querer ser madre?
No existe una única causa para que se tome esta decisión, cada una tendrá la suya. Algunas de las causas para no querer tener hijos pueden ser:
- Que esa mujer no quiera asumir esa responsabilidad, que es una responsabilidad importante.
- Que tenga otras prioridades donde no entra la de ser madre, como por ejemplo dedicar el tiempo a su desarrollo profesional.
- También puede ocurrir que no tenga el instinto maternal que se nos presupone a todas las mujeres.
- Que no le gusten los niños, y este motivo se podría decir que es, de todos, el que está peor visto por los demás. Pero es que no te tienen por qué gustar los niños.
Pero también puede ocurrir que una mujer no tenga ninguna razón en concreto para no querer tener hijos, puede ser que simplemente no quiere.
El tabú de no querer tener hijos
Todo esto provoca que el entorno de estas mujeres hagan unos juicios de ellas, de manera despectiva claro está. Se suele decir que son personas egoístas, inmaduras, irresponsables, etc.
Se piensa incluso que las mujeres, o las parejas (que también las hay) que no quieren tener hijos, no van a ser felices…como si la felicidad radicara exclusivamente en si se tienen hijos, o no.
Los expertos en este tema niegan que las personas que tienen hijos sean más felices que las que no los tienen, por supuesto todo depende de los objetivos que tenga cada persona en su vida. Si uno de los objetivos de una pareja es tener hijos, el no poder tenerlos sí que puede ser un motivo de infelicidad, pero no es así cuando es una decisión voluntaria.
Además, los expertos también alertan de que las parejas que no quieran tener hijos se verán presionadas por la sociedad, que verá esta decisión como egoísta y antinatural.
Tanto es así, que cuando una pareja no tiene hijos, su entorno social empieza a pensar que es porque no pueden tenerlo. Es decir, en ningún momento se contempla la opción de que sea porque no quieren.
Tener hijos no tiene por qué hacerte mas feliz
A mi me parece que esto es bastante obvio, es obvio que tener hijos no tiene por qué hacerte más feliz que no tenerlos. Es obvio también que no es una obligación tener hijos.
Pero entonces… ¿por qué hay gente que lo critica y lo ve como extraño? Quizá porque es una norma social que aunque no esté escrita en ninguna parte, sí que es una norma preestablecida que tendemos a cumplir.
Se trata, en realidad, de un prejuicio más. De la asignación de unos determinados roles dependiendo del género. El estereotipo de que una mujer debe aspirar a ser madre, para poder convertirse en una persona completamente realizada. Sin embargo, y aunque a mucha gente le parezca extraño, lo cierto es que no querer tener hijos es una decisión igual de buena y por supuesto, igual de respetable que la de sí querer tenerlos.
Si eres de ese grupo de personas que no entiende del todo esta decisión, hay varias cosas que puedes hacer:
Como por ejemplo, respeta las decisiones de los demás, no pienses que si no hacen lo mismo que haces tú, es que están equivocados, no des consejos que puede que a otras personas no les vengan tan bien como a ti.
Y sobre todo, no hagas juicios de lo que deciden los demás. Una mujer que no quiere tener hijos, no es egoísta, es, simplemente, una mujer que no quiere tener hijos.
¿Qué puedes hacer para afrontar las críticas?
Si estás en el otro lado, es decir, si eres esa mujer que ha decidido no tener hijos, es muy probable que recibas alguna crítica por ello. Por lo general estas críticas vienen de la propia familia o amigos, que lo ven como algo antinatural.
Además, la mayoría de las veces, la crítica va formulada en tono de pregunta; que puede pasar más desapercibida pero que también produce mucha presión.
Si esto te ocurre, puedes:
- Primero que nada, confiar en ti misma y en tu decisión, sabiendo que esa es la mejor para ti en función de tus gustos y de tus circunstancias. Dicho de otra manera, si lo tienes claro, si sabes que eso es lo que quieres, no te dejes influir por los comentarios externos.
- Si en algún momento te apetece explicar cuáles son tus motivos, hazlo. Si no te apetece, busca una respuesta que sea lo más asertiva posible, y utilízala como comodín siempre que alguien pretenda influir en tu decisión.
- Entiende que cada uno tiene su opinión. Por lo tanto, respeta la de los otros pero también la tuya y no entres en debates o discusiones que te pueden agotar.
- Por último, si esas críticas te afectan demasiado, la ayuda de un psicólogo te puede servir para buscar opciones que te ayuden a gestionarlas…además de aportarte respuestas adecuadas.
Rosa Armas
Colegiada T-1670.